En el aislamiento de supermercados tiene que ser efectivo, ya que la mayoría se ubican bajo viviendas, por lo que no sólo es necesario aislar el ruido aéreo, sino también el estructural (vibraciones). El cliente solicitó este tipo de reforma para el Supermercado de Alcampo en Vigo que consistía en un cerramiento acústico con la parte superior inclinada 45º y divisores entre máquinas, sólo en la parte superior. El color del acabado, similar a las piedras de la cubierta, fue el elegido por el Hotel Coia, situado a pocos metros y de mayor altura, para evitar impacto visual de sus clientes. En este caso no sólo se trataba de cumplir con los límites de ruido con respecto a las viviendas cercanas y hotel, sino incluyo evitar molestias a los huéspedes del hotel.